Fecha: 19/2/2024

El vino de tea de La Palma está a punto de ser declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Patrimonio Inmaterial de Canarias. La Pequeña DO La Palma ha avalado esta  declaración que ya ha sido admitida a trámite  por unanimidad por el Cabildo Insular de La Palma y que ahora debe elevar la propuesta al Gobierno de Canarias. A partir de ese momento el proceso quedará en manos de la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes, entidad competente en materia de patrimonio cultural y responsable de gestionar los procedimientos de declaración de bienes de interés cultural en las islas.

La declaración de BIC del vino de tea supondría un reconocimiento a la singularidad y relevancia cultural de este producto único en el mundo, contribuyendo así a su preservación y difusión a nivel nacional. El vino de tea se elabora principalmente en tres municipios del norte de la isla palmera -Puntagorda, Garafía y Tijarafe- a partir de la mezcla de uvas blancas y tintas, siendo la  crianza en pipas o barricas fabricadas con madera de tea del pino canario el elemento determinante de sus peculiaridades. El paso por la madera resinosa del Pinus Canariensis es lo que le confiere una composición organoléptica única que recuerda vagamente al vino griego retsina.

Aval Científico

La propuesta del vino de tea como BIC está, además, avalada por numerosos estudios científicos liderados por Pablo Alonso González y Eva Parga Dans, del Instituto de Productos naturales y Agrobiología del CSIC (IPNA-CSIC). Desde 2019, ambos investigadores desarrollan estudios multidisciplinares encaminados a dotar al vino de tea de un marco científico que contribuya a su conservación y proteja su elaboración tradicional.

Entre otros hallazgos, Alonso y Parga han concluido que parte de sus singularidades están relacionadas con su elevada concentración en alfa terpineol (α-terpineol), una sustancia con potencial antiinflamatorio, anticancerígeno, antioxidante y hasta cardio-protector. Otro aspecto que ha centrado el trabajo de los investigadores del IPNA-CSIC ha sido el ligado a las pipas de tea y que son, en términos patrimoniales, únicas e irrepetibles. Actualmente es imposible fabricar nuevas barricas de corazón de pino canario por un doble motivo: por la protección de dicha conífera y por la desaparición de la profesión de la tonelería.