Fecha: 17/07/2017
La Asociación de Viticultores y Bodegueros de Canarias (AVIBO) ha suscrito un acuerdo de colaboración con la Estación Enológica de Haro, entidad dependiente del Gobierno de La Rioja, por el cual se acometerán los estudios analíticos de los vinos producidos en todas y cada una de las comarcas vitícolas de nuestro Archipiélago. Estos estudios desembocarán en la generación de la “huella dactilar” de cada uno de ellos, lo que permitirá importantes avances en el seguimiento de la trazabilidad, control de calidad y de origen, al tiempo que serán una contribución de especial relevancia para el campo de la investigación.
Para llevar a cabo este estudio se utilizará la Resonancia Magnética Nuclear (RMN), técnica ésta muy versátil y con un ámbito de aplicación diverso, que va desde el campo de la medicina – en la identificación de marcadores de enfermedades – hasta el alimentario para la certificación del origen de los alimentos y bebidas o, como en este caso, el apoyo a la investigación vitivinícola.
Este estudio permitirá a los vinos de Canarias, en un futuro muy próximo, por un lado, certificar su origen – lo que facilitará su comercialización en cualquier mercado del mundo con todas las garantías y total seguridad – y por otro, ofrecerá a nuestros vinos mayor prestigio, al ser ésta una herramienta eficaz para detectar posibles fraudes en la venta de los mismos.
La Estación Enológica de Haro es la entidad responsable a nivel mundial para desarrollar la base de datos de los vinos de toda España, para lo cual ha recabado la colaboración de las Denominaciones de Origen de nuestro país, Estaciones Enológicas y Laboratorios Oficiales además de las propias bodegas, eligiendo como responsable y partner exclusivo para Canarias a la Asociación de Viticultores y Bodegueros de Canarias (AVIBO), quien ya ha remitido las muestras de vinos de todas y cada una de las Islas de nuestro Archipiélago.
Esta red mundial de muestras de vinos será una poderosa herramienta para asegurar la calidad, la trazabilidad y el origen de los vinos de Canarias.
La Huella Dactilar del Vino
Para el análisis mediante Resonancia Magnética Nuclear (RMN) se necesita menos de un mililitro de vino. Tras un ajuste de pH, la muestra es introducida en el núcleo del equipo Wine Profiling, donde se toma una “instantánea” del vino analizado.
En apenas 20 minutos, Wine Profiling identifica de forma simultánea medio centenar de compuestos de cada muestra de vino; en concreto, todos los que poseen hidrógeno en su estructura química. Cada compuesto analizado – el grado alcohólico, el málico, el tartárico … – representa varias señales, que en su conjunto crean un perfil espectral único para cada vino, su “huella dactilar”.
Esta “huella” o perfil se cruza con los vinos introducidos en la base de datos internacional y, mediante análisis quimiométrico, determina con total fiabilidad la variedad, la añada, la región de origen y el país del vino analizado.
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